¡RECUÉRDALOS.PUEBLO! (cesado): Norkys Batista

Preliminar

Recordar el pasado para no hundirnos nuevamente, más que un acto de supervivencia política es un gesto de amor por la patria, y más que un gesto, es un hecho instintivo, porque nadie nunca pretenderá su autodestrucción. No aceptamos, pues, el argumento de que esta página promueve el odio entre paisanos. Lo dicho está sustentado siempre en el contexto de la prensa responsable venezolana, con nombre y apellido, y es del conocimiento abierto de todos. Me identifico claramente al pie de cada post. Para aquel que tuviere alguna objeción respeto del contenido de la página, le sugeriría primero echar un vistazo en la red, en páginas como, por ejemplo, reconocelos.com y otras que hacen un trabajo de contraparte, recordando el sabroso refrán que reza "Lo que es bueno para el para el pavo lo es también para la pava" Digamos también que la ley es lo primordial en una república, y que en la nuestra el imperio de la ley nos procura una hermosa libertad de opinión, de la que soy individuo en sujeción.

lunes, agosto 06, 2007

Norkys Batista

Recopilado por Oscar J. Camero en 6:02 p. m.

Nace en Caracas, 30-08-77, según datos de su sitio oficial. Inicio su carrera realizando comerciales, pasarela y modelaje, último desempeño que la lleva a visitar los Estados Unidos. De nuevo en el país, participa en diversos concursos de belleza y se dedica posteriormente a la actuación y comerciales y a la carrera universitaria de mercadeo. Es finalista en el Miss Venezuela 1999, un año después de la elección de Hugo Chávez como presidente. Es de destacar que, según palabras propias, Radio Caracas Televisión (RCTV) -canal al que no se le renovó la concesión de transmisión en el 2.007- fue el "primer canal de televisión donde trabajé", considerándolo su "casa".
Destacó en las siguientes telenovelas, todas después del año 2.000:

2.002: Juana la Virgen

2.002: Mi gorda bella

2.004: Estrambótica Anastasia

2.004: Amor a palos

Además de la película 13 segundos (2.007).

Gusta declarar cuando tiene ocasión que "viene de abajo", de un barrio o de un lugar de bajos ingresos, lo cual le da más relieve a sus aptitudes de mujer triunfadora, vencedora de obstáculos que aparentemente sólo pueden superar los que están arriba.

En pleno inicio triunfador de su carrera, prácticamente en el principio del milenio, con trabajo y planes en la planta RCTV, surge en su camino una piedra infranqueable, en su propias palabras "un ser ofensivo y grosero", Hugo Chávez, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, a quien acusa de cerrar por decisión personal su lugar de trabajo y cercenar la libertad de expresión en Venezuela, pasando por alto quizás por conveniente a su interés personal el hecho de que la Constitución consagra en su articulado la potestad del Estado para decidir sobre el uso del espectro radio eléctrico del país.

La contienda política la lleva al terreno de las pasiones desatadas y a perder el control sobre el arte de la palabra, poco favorable para su prometedora e incipiente carrera artística, pues la experiencia parece demostrar que el trabajo del escenario y la política no parecen comulgar entre sí debido a que ambas disciplinas se soportan en la aceptación de la opinión pública. El siguiente video la muestra en pleno furor antichavista, a propósito de la no renovación de la señal de RCTV:

Y el siguiente, proclamando por lo menos el derecho que como mujer tiene a ser grosera, en su textuales palabras al final del video ("soy grosera porque soy mujer"), como si retase al "dictador del siglo XXI", Hugo Chávez, quien no puede evitar que diga lo que dijo, incluyendo escupidas de caras al moderador de un programa:

Es lamentable, pues se sabe que hacerse un camino en el mundus de la farándula es difícil, y se malogran muchos talentos cuando se pierde la perspectiva del oficio. Rubén Blades, Arnold Schwarzenegger, ejemplos muy recientes, incursionaron exitosamente en la política, pero ya durante una etapa de consagración profesional.
Nota posterior (20-08-07): vea cómo el diablo paga, como dice el refrán. Después de tanto esfuerzos, ¿qué? Fue despedida de la planta televisora, inmisericordemente.